diccionario de la moda de los ochentas

¿Ya viste nuestro diccionario ochentero? Hoy te presentamos las primeras tres letras del abecedario.
Seguro ya te lo dijeron, lo sabes o viste nuestra hermana Revista Chilango. Nos pusimos ochenterísimos y sin pena alguna. Para que tengas voz en el asunto, aquí te pasamos las primeras letras del abecedario retro; y como sabemos que no te vas a quedar callado, estamos esperando tus aportaciones al asunto.

Por planear, escribir y editar este diccionario tuvimos que entrar a terapia para olvidar todo lo que nos traumó durante una década. La idea es que lo leas y te traumes igual. Feliz viaje a tu pasado más oscuro, ochentero(a) de clóset.


Dicen que los ochenta están de regreso. Lo cierto es que en esta ciudad nunca se fueron. Y como no hay manera de superar los traumas sino enfrentándolos, es que armamos este diccionario con las cosas, personajes, situaciones y absurdos que hoy nos provocan más regresiones terroríficas: «¡Cómo pude llevar ese peinado toda la prepa! ¡Aaaargh!», «¿Y te acuerdas del pandita? ¡Nooooh!» «¡Cielos! Esa canción es de… ¡de Juguemos a cantar! ¡Auxilio!»




En fin, no queremos causar más estragos. Bienvenidos a los ochenta según Chilango.



A

Aeróbics: Evelyn Lapuente fue la precursora pero Jane Fonda popularizaró el acondicionamiento físico que trajo el desastre estético de los calentadores, tenis Reebok y bandas en la frente.

Andy Bridge’s: Andrés Puente (quien sería el azote de Tatiana en más de un sentido) abrió su lugar en el corazón del Fraccionamiento Echegaray, frente al vaso regulador de El Cristo. Las legiones de moscos que aguardaban cada noche a la salida refrendaban su inmejorable ubicación.



B



Banca, nacionalización: 1º de septiembre de 1982. El día de su último informe, López-Portillo nacionalizó los bancos. Se estableció el control cambiario y las cuentas en dólares fueron cambiadas, a lo chino, a pesos. Todo fue inútil: como golondrinas, los billetes salieron volando del país. (Ver Guillermo Ochoa)

BASIC: lenguaje que revolucionó la programación computacional y que uno realmente no utilizaba para nada.

Beta: en tu casa, en los recién creados video clubs (Zafra, Video Centro, Videovisión, Videomax), en los aparatos monumentales que tenían el reloj aparte, o con control remoto (con o sin cable) o en aquellas sin botones. El formato de Sony inundó México cuando el mundo se convencía más y más del VHS. Fuimos Beta en todo.

Botellita de Jerez: Los Panchos, Los Tres Diamantes, Los Botellos… Algún día valoraremos lo que el ingenio, el humor, la visión y el desparpajo de este trío hizo por la música en México. En 1982 se juntaron Sergio Arau (El U-yu-yuy), Paco Barrios (El Mastuerzo) y Armando Vega Gil (El Cucurrucucú) y, antes de haber grabado un disco, los invitó “Chicho” (hermano de Sergio) a participar en un capítulo de Cachún Cachún Rá Rá. Cual cuento de hadas, Óscar Sarquiz los vio en la tele, se sorprendió y se los llevó a Polygram.

Burbujas: salió en 1979. Pero la Odisea es del 80. Aunque fuera en secreto ¿a quién no le gustaba ver al Popotito 22 con un científico loco, unos animales mutantes y un criminal ambiental? Sus LP’s de colores con la música de Juan García Esquivel ahora valen una fortuna.


C



Cachún Cachún Ra-Ra: en 1981 abrió sus puertas esta preparatoria que pintaba más divertida que la telesecundaria. La directora “Godzilla” Bonilla lucharía sin límite de tiempo para educar a Petunia, Nina, Lenguardo, Calixto, Jagger, Babis, Chicho, Huicho, Lino, Beto y una larga lista que incluyó a Eugenio Derbez, Nailea Norvind, Ernesto Laguardia y Adela Noriega. En 1987 terminaron la serie y para entonces, todos eran unos fósiles.

Cantaré Cantarás: grabado en 1985 fue el Live Aid y el We are the World de los pobres hispanoamericanos. Cantaban con emoción y audífonos Plácido Domingo, Palito Ortega, Manoella Torres, Fernando Allende, Lucía Méndez y varios más.

Carabina de Ambrosio, La: programa cómico-mágico- musical. Brillaba por los títeres con cabeza de César Costa y Chabelo, los trucos chafas de Beto el Boticario, el peluche de Peggy, los mercados de lágrimas, las palabras que cantaban con Alejandro Suárez y las docenas de pares de brazos y piernas de Gina Montes.

Caravana, La: «Chamacos ¿Quieren que les cuente un cuento? ¡Pues se lo soplan!» Víctor Trujillo fue locutor de la XEB y voz de Leon-O (el Thundercat). Ausencio Cruz escribió guiones para Hogar Dulce Hogar, Chiquilladas y ¿Qué nos Pasa? Los dos se conocieron en la Carpa Geodésica y se afianzó una gran pareja cómica en la revista de Imevisión En Tienda y Trastienda en 1987. Un año después apareció en el 7 La Caravana y nos obligaron a quitarnos el sombrero ante personajes como Estetoscopio Medina Cháirez, Brozo, Jhony Latino, Margarito y Valente Campillo.

Carmina Burana: colaboracíon del “Cougar” de Ford al enriquecimiento de nuestra cultura musical.

Cineteca Nacional, Incendio de la: miércoles 24 de marzo de 1982/ Estudios Churubusco/ Tarde-noche. Varias explosiones se oyen en el edificio de la Cineteca y comienza a arder en llamas. En menos de seis horas el Salón Rojo, la Sala Fernando de Fuentes, la biblioteca y la producción fílmica de ocho décadas quedan achicharradas. Nunca pudieron explicar qué lo detonó. Que si fue un plan de “Macartita” López Portillo, que si un corto, que si el nitrato… Fue devastador. Ya ni trato de pensar.

Ciudadano Infraganti, El: (1983, canal 13) Óscar Cadena se quedó sin chamba y decidió salir a la calle con una cámara y captar todas las joyas de la ciudad: gente tirando basura en la calle, pasándose el alto, estacionándose en doble fila, dando mordida al poli, al de la grúa… las verdaderas gemas eran las excusas que la gente daba para ser tan poco cívica.

Creel, Catalina: María Rubio encarnó a este personaje con parche en el ojo (cuyo color cambiaba para combinar con sus vestidos) en la emblemática “Cuna de Lobos”. Cuentan que a la hora que se transmitió el final de la telenovela, se congeló la ciudad. Catalina Creel fue mucho peor que sus parientes “políticos” Lola y Santiago.

Crisis del 82, La: no es la primera ni la última pero en ésta, la caída de los precios del petróleo pone en evidencia cómo dependíamos de él, cómo nos habíamos endeudado estúpidamente y cómo habíamos gastado más de lo que podíamos pensando en la bonanza. Crecieron las importaciones. La inflación subió a 70%. Subieron las tasas de interés. Fuga de capitales. Dejamos de pagar la deuda. ¿El dólar? En 1982 pasó de $22 pesos por dólar, a $148.5 pesos por dólar (hubo niveles en 1986 de $915 pesos x dólar). Es a partir de aquí que se disparó la migración de mexicanos a los Estados Unidos.


CH

Chiclamino, azúl: tonalidad que puso de moda Canal 4 en 1986 el peculiar vendedor de autos de Teleoportunidades. Aunque significa “azul violáceo” todos aplicábamos «¡Chiclaminísimo!» a cualquier color eléctrico e indescriptible.

Chiquitibum, La: con minifalda, playera recortada, y balanceo sepsy Mar Castro fue la pechonalidad de los anuncios de Carta Blanca y la verdadera mascota del Mundial 86. Ahora prefiere cantar, componer y olvidarlo todo.

Chispita: en 1982 XE-TU hizo un concurso para encontrar a la doble del insufrible personaje de Lucerito. Los premios: salir como prima de la protagonista y una beca para estudiar en el Centro de Capacitación de Televisa. La chica de 14 años que arrasó con todas fue Gloria Trevi y nunca apareció en la telenovela

Churros: con López Portillo prácticamente desapareció el presupuesto oficial para el cine mexicano, que entró en su etapa más escabrosa. Entraron a escena Televisa y otros productores interesados en hacer películas con buenorras y cómicos pelados. Son los años de Lola la Trailera (1983), Vacaciones de Terror (1989), Lagunilla, mi barrio 1 y 2 (1981 y 83), Un Macho en el Salón de Belleza (1987) y un largo y terrible etcétera.




D

Danceterías: el “Dancetas” en la calle de Londres (después se volvió Cícero Centenario) y el Danzoo, de los mismos dueños, en Insugentes Sur (donde era El Candelero). En ambos, la música, el que pudieras estar parado y el ambiente “darkón”, te hacían sentir 20% menos fresa cuando salías a bailar.

Deneken, Lila: la número UNO, Uno, uno, uno, uno…

Disco compacto: lo era tanto que, cuando comenzó a venderse en 1983, se le tuvo que poner un empaque de cartón rectangular para que no se sumiera en los muebles donde se vendían los acetatos de 33. Con sonido y precios grandes, aquí se hizo más común hasta el mero final de la década.

Disco Jackson, La: César Bono conducía en Canal 4 este programa de concurso inspirado en la música, el look, y los bailes de Michael Jackson. Aunque se volvió más de break dance es una prueba intimidatoria de que algún día quisimos ser como él.

Duende Bubulín, El: el Zapato Papo, Yeyo el Camello y Tita la Perlita comenzaron a existir musicalmente en 1975 y tuvieron un programa en Monterrey. Margarita López Portillo (directora de RTC) se lo trajo a trabajar al Canal 13 y, en 1981, El Duende Bubulín dejó de transmitirse por rollos sexenales. Pero el chileno Juan Carlos Abara no nos hizo saludito de duende y dejó de influir en nuestras nostalgias: en 1982 fue el productor de Juguemos a Cantar y en 1985 escribió las canciones del Mundial México 86.

Durazo Moreno, Arturo: por ser cuate de la infancia de José López Portillo, obtuvo el puesto de Jefe de la Policía y Tránsito del Departamento del DF. “El Negro” Durazo recorrió la República para exigir cuotas a todos los mandos de la policía, organizar secuestros y permitir el trafico de cocaína. Se construyó un Chalet en el Ajusco y una réplica del Partenón en Zihautanejo. Con contrincantes como Carlos Hank González y Jolopo, no fue el peor pero sí el más burdo. Huyó, lo pescaron y en 1986 fue acusado de acopio de armas, evasión fiscal y homicidio múltiple. Nunca por corrupción. De los 16 años que le tocaban sólo estuvo entambado seis. “Negro Durazo” y “Azul chiclamino”… en el pantone de los años 80 todos los colores pudieron coexistir.




E

ECO: Emilo Azcárraga Milmo tuvo la idea de unir a toda la población de habla hispana a través de este canal informativo y de entretenimiento. El problema, señala Víctor Gordoa, es que se hizo al principio del Salinato cuando no había dinero, exigiéndole a la gente que hiciera mucho con muy poco y acabó fracasando.

ERES: el 16 de septiembre de 1988 salió esta revista-fenómeno-editorial en los tiempos en que Televisa dictaba que sí y que no existía. Era la primera dedicada tanto a mujeres como a hombres de 15 a 20 años, un mercado nunca antes explorado. La campaña televisiva comenzaba con el artista de la portada describiéndose y remataba preguntando «Y tú… ¿quién eres?» (Ver Carlos Méndez)




F

Fayuca: si no podías viajar, nunca faltaba el amigo del amigo que tenía un cuate en la aduana o alguien que tenía un pariente piloto o sobrecargo. O también podías ir a los tianguis como el Bazar de Lomas Verdes y Pericoapa a comprar tus casets de cromo, los codiciadísimos dulces gringos, un cartucho para tu Atari o tu Nintendo, unos tenis, tu Giorgio Beverly Hills… Pero en este mercado negro de toldos amarillos también comprabas la moda desechable, cualquier cháchara entre “cuadros y revistas, camisetas, discos y jeans” que cantaban las Flans en “Bazar”.

Flans: Ivonne Margarita Guevara García, Ilse María Olivo Schweinfurth e Irma Angélica Hernández Ochoa. Qué bueno que en 1985 nosotros sólo las conocimos como Ivonne, Ilse y Mimí.

Fosforescente: ropa que causó daños al buen gusto y a tus pupilas.

Fruti Lupis, Dulcereal de Trigo, Atlantic, Caribe: en vez de Froot Loops, Smacks, Jetta y Rabbit. Esta tropicalización obligatoria de las marcas trasnacionales, las campañas en defensa del idioma español y hasta la traducción de los títulos de las canciones en la radio eran nuestras últimas patadas de ahogado contra el imperialismo; nuestro (vano) intento de mantenernos en el movimiento de países no alineados.

G

Girón, Carlos: él y el soviético Portnov iban empatados en el trampolín durante las Olimpiadas de Moscú en 1980. Justo antes del último clavado, hubo ruido en la alberca porque se rompió un récord; Portnov saltó y cayó de espaldas. La delegación soviética echó montón, le dan otro chance y así le quitan a Girón la medalla de oro que verdaderamente le pertenecía. La desgracia más grande fue que Javier Ostos Mora, el delegado mexicano, ni pío dijo.

Girón, Fito: de la Fiebre de Sábado con Chela Braniff y la voz de Mario Vargas en 1979, Fito Girón pasó a las salvajes aventuras dentro de lugares como el Africam Safari. Fantástico Animal fue ese programa de naturaleza que le hizo falta al Ponchovery Chale

Güiri-Güiri, El: en 1985 Andrés Bustamante pasó de ser el coordinador de producción de la Unidad de Televisión Educativa y Cultural de la SEP a ser Timo (Ñooooiiiii) en “Los Cuentos del Espejo”. Luego vinieron los programas “Entre Amigos” con Alejandro Aura, “Sin Tornillos” y “El Güiri-Güiri”. Por crear a personalidades como El Dr. Chun-Ga, el profesor Greco Morfema, el conductor de los Güiri-Güiness, Ponchito y Mambrú Molotov, Bustamante algún día recibirá condecoraciones por ser un gran cómico de México y por sus innovadoras aportaciones al uso del hule espuma.

Gumis: (o Gummies) los negros de hule eran empaques para máquinas industriales. Luego vinieron los de colores transparentes que semejaban gomitas estiradas. Se usaban como pulseras pero el non plus ultra era ponerlos unos tras otros desde la muñeca hasta que se atoraran con el codo.




H

Hombreras: la imagen de poder era todo. Si el gimnasio tomaba la calle ¿por qué no salir con estas versiones acolchonadas del uniforme de futbol americano?



I

Imevisión: el 29 de abril de 1985 el gobierno anunció que el Instituto Mexicano de Televisión se llamaría desde ahora Imevisión y dio a conocer una nueva frecuencia en la Ciudad de México: el canal 7. La televisora salió al aire el 18 de mayo de 1985 con las siglas XHIMT encabezando una red nacional integrada por 99 emisoras. Pese a los malos manejos y corrupción que la aquejaron, Imevisión demostró, aunque por poco tiempo, que era posible hacer programas inteligentes con muy poco presupuesto.




J

Jolopo: (alias José López Portillo) Presidente histriónico y carismático (1976-1982) que tuvo frases memorables como «Ahora como mexicanos tendremos que aprender a administrar la riqueza» hasta la de «Defenderé el peso como un perro» pronunciada, el 17 de agosto de 1982. Cuestión de enfoques pero todo nos lo cumplió: con la hiperinflación a todos nos hizo “millonarios”; luego exiliado en su canina Colina con lo que se robó, se quedó administrando y disfrutando sus huesos y nosotros, abajo, nomás con la rabia.

Jordache: si nuestras abuelas no usaban ropa de mezclilla por considerarla “de obreros”, ahora se requería del sueldo de varios para adquirir estos jeans que se distinguían por sus bordados en las bolsas traseras. Había Sergio Valente, Calvin Klein, Gloria Vanderbilt, Edoardo’s, pero los de la marca del caballo relinchaban “ochheeeentaaas” con enjundia.

Jornada, La: en 1983 Carlos Payán, Carmen Lira, Héctor Aguilar Camín, Miguel Ángel Granados Chapa y Humberto Musacchio, directivos del periódico Unomásuno, se enfrentaron con el Director General, Manuel Becerra Acosta, básicamente, por una cuestión sindical: el director quería reprimir la huelga del periódico trayendo a la policía. Los directivos se opusieron. Este pleito se volvió más grande, mucha gente se salió y de esta ruptura, en septiembre de 1984, salió a la luz el periódico La Jornada.

Juanga: 1980, presentaciones en el Fiesta Palace. 1981, “Noa-Noa” rompe récord en taquilla y homenaje en Siempre en Domingo.1983, debuta en El Patio y graba “No me vuelvo a enamorar”. 1984, “Querida” permanece un año en el 1er lugar. 1987, “Debo hacerlo” es otro éxito. 1989, debuta en el nuevo centro de espectáculos Premier con llenos absolutos durante un mes. Juan Gabriel el único al que se le permite hacernos gritar ¡Y arriba Juárez!

Juguemos a Cantar: 1982. Siguendo la moda de los niños cantores, mis amigos y yo mandamos un caset casero cantando “Buenos Días Sr. Sol”. No teníamos nada que hacer ahí. Principalmente con Juanito Farías que cantaba “Caballo de Palo”. Más allá del fenómeno lacrimógeno, resulta que Omar Alfano, compositor de la canción, hizo también “El Gran Varón” inmortalizada por Willie Colón. Así ¿cómo se puede competir?




K

KCT: (cassette) con esta cinta magnética encapsulada en una cajita subías programas a tu computadora y grababas música del radio. Ya como algo especial, con la ayuda de otros “casets” y discos, hacías una selección con nombres como “Soul y Soul”, “Variadito Actualidad”, “Calmaditas II”, o “Special Jet Set”. Ésta era para dársela a tus cuates o a la “niña” o “niño” que te gustaba, o para escucharla y echarle limón a la herida cuando te bateaban.

Keiko: esta orca macho costó unos $350,000 dólares y la trajo (desde Canadá) Carlos Hank Rohn a Reino Aventura en 1985. Aunque se le dobló su aleta dorsal, desarrolló unos raros papilomas en la piel y carcomió nerviosamente el concreto de su tanque, Keiko fue adorado por todos y ¡créanlo insensatos! también nos amó a su manera.

Kumán: 1984.Primera ópera rock mexicana producida por Irene Sabido y presentada en uno de los Televiteatros. Tatiana Palacios (sí, Tatiana) y Aarón Montalvo eran los estelares y el heavy metalero grupo Cristal y Acero tocaba en vivo en todas las presentaciones.




L

“¡Lástima Margarito!”: expresión que aventaba Jhony Latino (Víctor Trujillo), el maldito conductor del concurso La Pirinola. Margarito (Ausencio Cruz), a quién las edecanes llevaban al baile, representaba al que casi-casi se acerca, al que ilusionan, se lo agandallan y se queda sin nada. Si en los 90 todos fuimos Marcos, en los 80 a todos nos tocó ser Margaritos.

LUCC, El: La Última Carcajada de la Cumbancha, en la calle de Perpetua en la colonia San José Insurgentes se inaguró en donde era el local de Discos Ser, una “discoteca” en la que podías encontrar rarezas y hasta encargar otras en la época en que había más restricciones a los productos importados. A partir de 1987 este foro fue una rareza en sí mismo ya que en una Ciudad donde los conciertos de rock estaban prácticamente proscritos los chilangos llegamos a ver en el LUCC a Jane’s Addiction y a Mano Negra.